Andalucía y la eficiencia energética, ¿Por qué? El sur de España tiene una gran variedad de climas. Desde los climas templados de sus costas, hasta los extremos del interior (probablemente los más calurosos de Europa) e incluso climas de alta montaña. Eso hace que en la mayoría de sus municipios, las temperaturas varían mucho de los meses de verano a invierno. En las épocas más calurosas, podemos llegar a superar los 40 grados. Y en invierno experimentan un descenso considerable, llegando en muchas áreas a bajo cero. Ni nuestros edificios públicos ni privados están adaptados para estos cambios.
“El gobierno Andaluz ha dado su apoyo a una iniciativa legislativa del grupo Adelante Andalucía. Para mejorar la eficiencia energética en los centros educativos.”
Los colegios y los hospitales son grandes muestras de ello. En el caso de los centros sanitarios, el gasto en energía es notablemente alto. Para conseguir que se mantengan climatizados todo el tiempo. En los colegios públicos, no suele haber sistema de climatización. De ahí que profesores y padres se quejen de las condiciones en las que sus hijos estudian durante el año.
Recientemente el gobierno andaluz ha dado su apoyo a una iniciativa legislativa del grupo Adelante Andalucía. Para mejorar la eficiencia energética en los centros educativos. Se pretender llevar a cabo mejoras en los colegios e institutos, para que las temperaturas sean estables y confortables. Para que el aire que se respira en las aulas sea limpio. Esto supone un paso adelante para acercarse al estándar passivhaus.
La escuela de emergencias para el SAMU en Gelves, es un ejemplo de centro educativo proyectado con el estándar Passivhaus por Castaño & Asociados. Con cerca de 4.000 m2, una vez construido, tendrá una factura energética en climatización de alrededor de 4.000€/año. Con un altísimo grado de confort interior.
LA CALIDAD DEL AIRE INFLUYE EN LA CONCENTRACIÓN EN LAS AULAS
Es muy importante apostar por modelos constructivos que mejoren las calidades del aire y de climatización de espacios públicos. En los edificios Passive House, uno de los principios es la ventilación continua sin necesidad de abrir ventanas. Lo que proporciona una calidad del aire excepcional, libre de partículas y ácaros.
“La ventilación mecánica reduce la cantidad de CO2 en el ambiente, lo que regula nuestro nivel de concentración y somnolencia”
Además la ventilación mecánica reduce la cantidad de CO2 en el ambiente, lo que regula nuestro nivel de concentración y somnolencia. Al ser a través de un intercambiador de calor, disfrutamos siempre de una aire en las mejores condiciones, sin perder energía.
PASSIVHAUS ES TAMBIÉN SALUD
Ni mohos, ni condensaciones. Los requerimientos de calidad que exige el estándarPassivhaus hace que no sea posible el crecimiento de mohos ni la aparición de condensaciones en ningún elemento constructivo. El control exhaustivo del proceso constructivo hace que la edificación tenga unas calidades óptimas.
“A través del sistema de ventilación tenemos aire limpio continuamente”
Entre 20 y 25ºC de temperatura, humedad relativa entre 30% y 70% y una concentración de CO2 inferior a 1.000ppm. Esta es la calidad del aire que define el estándarPassivhaus. Vivir fuera de estos parámetros puede afectar a la salud. Enfermedades respiratorias, dolores de cabeza, baja capacidad de concentración, son algunos de los efectos.
A través del sistema de ventilación tenemos aire limpio continuamente y puede contar con filtros antipolen que limpian continuamente el aire de la vivienda y resulta muy eficaz para personas alérgicas al polen o a otras partículas que viajan en el aire. En centros escolares es muy efectivo para prevenir además el contagio de enfermedades entre los pequeños, para eliminar olores y para disponer de una calidad óptima del aire, y no lo que ocurre en la actualidad, que lo explica gráficamente la imagen.
AHORRA EN ENERGÍA, INVIERTE EN LAS PERSONAS.
Vivir muy bien gastando muy poca energía es lo que conseguimos construyendo un edificio bajo estándarPassivhaus.
“Un consumo mínimo,un confort óptimo y una calidad óptima y saludable del aire es lo que nos aporta una casa pasiva.”
Un consumo mínimo (unos 120€/año por cada 100 m2), un confort óptimo y una calidad óptima y saludable del aire es lo que nos aporta unacasa pasiva. A cambio un pequeño sobrecoste que se valora entre un 3% y un 7%, que se recupera en los primeros 7 años aproximadamente.
Poco a poco los edificios coneficiencia energética más rentables y más sostenibles van entrando en los programas políticos. El estándar Passivhaus es sin duda el estándar eficiencia energética que más encaja en estos proyectos. Esta apuesta andaluza por que sus colegios sean más eficientes. Es un buen atajo para ponernos a la cabeza en España en este sector.
